Nosotros

Florio fue fundada en 1912 por un inmigrante italiano, Antonio Florio, quien decidió plasmar su tradición en suelo mendocino, ya que reúne excepcionales características para el desarrollo de los viñedos. Desde entonces, en la bodega, se elaboran estilos únicos con una gran tradición, Gamba Di Pernice y Nebiolo, así como también los reconocidos vinos generosos, Marsala, Moscato, Oporto y Jerez.

En los últimos años se incorporan a Florio dos familias argentinas, quienes tomaron esta tradición como propia y le dieron un importante impulso a la bodega, surgiendo nuevos estilos de elaboración, tales como los dulce natural, los tintos varietales, vinos de guarda y diferentes espumantes.

Hace poco más de 11 años, Florio decide abrir sus puertas al visitante y compartir con ellos la tradición conservada a lo largo de los años, procesos de elaboración, viñedos y degustación de sus diferentes vinos. Actualmente, muchas personas viven la experiencia Florio. La historia se escribe día a día, sin olvidar la tradición que hoy hace de Florio una marca registrada.

La especialidad de nuestra bodega se basa en vinos generosos como Marsala, Oporto y Moscato y, por los vinos del tipo espumantes como el Gamba di Pernice y Nebiolo. También elaboramos destacados vinos varietales: Malbec y Chardonnay. Para la elaboración de nuestros vinos contamos con diferentes variedades de uvas, las tintas, como ser malbec, ancellota, nebiolo y merlot. En uvas blancas, las torrontés, moscatel, chardonnay y Pedro Giménez.

En Bodega FLORIO centralizamos nuestra producción en el vino Marsala. Se elabora en enormes cantidades pues somos proveedores de grandes cadenas gastronómicas, pastelerías y heladerías ya que con este vino Marsala se hace el helado de sambayón. Cabe destacar, que abastecemos al 90% de las heladerías del país. El resto de nuestros vinos es de producción reducida y su exclusividad se concentra en nuestro sector de enoturismo y algunas vinotecas del país.